domingo, 30 de enero de 2011

Nuevo estilo de candombe

Además del candombe porteño, del candombe uruguayo, del candombe uruguayo aporteñado, del candombe de Castillo, etc. ahora también tenemos el candombe kirchnerista!


(Doble click para ver la imagen completa, o sino la dirección abajo)

Dejando de lado si es un “sentido homenaje” o un “propaganda política” –cada uno hará la interpretación más acorde con sus propios valores y preferencias (políticas, sentimentales, estéticas)- hay un par de cosas que me llaman la atención en este candombe-homenaje.
En principio, que el género musical elegido haya sido un candombe.
Ignoro si hay otras versiones, en otros géneros, dirigidos a otros públicos (un homenaje-cumbia, un homenaje-folklore, un homenaje-tango) (si no los hay, no sería una mala idea).
En segundo lugar, llama la atención el tipo de candombe que es. No sorprende, al menos por ahora, que el género no sea un candombe afroporteño, que está recién revisibilizándose y que difícilmente podría ser utilizado para un emprendimiento de este tipo.
Tampoco eligieron, sin embargo, un (tango-)candombe a la Castillo, un género que aún goza de cierta popularidad (no sólo en versión Decadentes).
No, eligieron un candombe uruguayo, pero claramente un candombe-uruguayo-a-la-Jaime-Ross. Ok, no parece raro, dados los gustos musicales de determinados sectores medios, con probable educación universitaria.
Lo que si me llama la atención, dada esta decisión, es la ausencia de tambores –en el video, y si mi escaso oído musical no me falla (tampoco lo quiero ver tantas veces) en la música. Se ve una batería haciendo el ritmo de las maderas. ¿Tan difícil está conseguir una cuerda de tambores en Buenos Aires estos días? –o al menos un tambor de candombe, cuando parece que cada joven porteño tiene uno debajo de la cama?
Este aparente desconocimiento de, o desconexión con, el extendido movimiento candombero de la ciudad se acentúa cuando se ven las imágenes de las manifestaciones populares que le darían, digamos, sustento visual al candombe de fondo. A partir del minuto 6, aparecen escenas de una murga (estilo argentino). Cuál sería la conexión con el candombe que se escucha? Probablemente, el deseo de conectar con el arte popular, según la visión de los productores del video. ¿Y los cientos –miles- de jóvenes porteños que tocan la música que se utilizó?
Tan sólo manifiesto mis sorpresas ante las elecciones musicales y visuales del homenaje. No puedo decir mucho más porque desconozco los motivos que llevaron a tomarlas. En youtube figura también una presentación del video en el programa 6, 7, 8 –en el cual supongo que darán mayores precisiones- pero no pude pasar de la presentación –una murga uruguaya cantando el conocido tema “Adios Juventud” de Jaime Roos- porque la imagen se congela. No sé si esa cortina es habitual en el programa. Obviamente tiene una conexión con la música del homenaje, e implica la misma ausencia de -espero que no el desdén por- las formas locales –en este caso, murga porteña.
Sí creo que el video es una buena muestra de cómo están jerarquizados los géneros musicales en nuestra ciudad, aún por parte de quienes seguramente, reclamarían su condición personal de “nac & pop”.

Agradezco a Ceci Galera


Fuente: http://www.youtube.com/watch?v=G9l5XAFlSkI

3 comentarios:

ariel dijo...

Querido amigo; que sabia y oportuna reflexión!
Fui invitado a participar del mismo y ante mi pregunta a los compañeros, que con muy buenas intenciones trabajaron en el tema con la premisa del homenaje,sobre la rítmica de dicho candombe me enviaron el tema en archivo.La incógnita era saber que decían ciando decían "candombe".Como ejecutor,compositor y también defensor de nuestro estilo,al que sumo por supuesto la murga porteña en el género,no pude dejar de explicarles a los compañeros(hay que decir que eran militantes antes que nada)que yo no podía participar de la grabación,precisamente por tratarse de una contradicción penosa de mi parte si me prestaba a aportar más a la confusión general en este tipo de expresiones.La orientación del tema a partir de la clave utilizada era evidentemente de corte uruguayo.Es común incluso entre músicos experimentados,algunos admirados por mí,argentinos, incurrir con cierta ignorancia en estos errores. El bautizar "rioplatanse"a lo que se hace,esconde la falta precisamente de compromiso u conocimiento de nuestro género de este lado del río.
Como en el caso de los coros d murga que suelen usar la coralidad de los vecinos de enfrente.
Finalmente no participe del sentido homenaje y quedó en pie la discusión antes los compañeros de la política,quienes deben entender ellos muy bien estas cuestiones a la hora de trabajar,con lo que cuesta ocupar y defender lo propio a los que estamos trabajando en ello.A veces la tarea es ingrata o agria,pero hay otras recompensas.
Una anécdota jugosa es por ejemplo el tema "Negra Murguera" de Bersuit,en donde la protagonista es una "negra"argentina,de murga argentina,en calles argentinas.La música original es de "marcha camión"uruguaya.Un reconocido cantante uruguayo no quiso participar de la grabación original porque consideró,muy metido dentro de su género local,que las "negras"no eran murgueras.Claro,en su país,en las murgas,escasean mujeres y sobre todo de descendencia afro ya en general sin distinción de sexo.
Por eso en nuestros conciertos,lo ejecutamos al mismo tema con uno de sus autores entre el grupo que me acompaña,Juan Subirá,en el modo de murga porteña.
A seguir en la brecha...
"El candombe no murió/en el barrio del tambor/muy porteño se mezcló/en los toques del murgón/en la murga revivió/meta rumba y guariló!"
Abrazos y gracias por el espacio!

AlePole dijo...

Estimado especialista: es bastante conocida la controversia en la identificación de "lo original", "lo puro", tanto para los investigadores como para algunos músicos que, además, disputan las credenciales para inscribir sus producciones dentro de esos valores. En el caso del "Nunca menos", lo que quizás sea interesante observar es que algo tuvo que pasar en estos últimos años de arte rioplatense para que un espacio militante se permita, no, mejor, se invente una excusa de "candombe" como canal apropiado para llevar adelante un homenaje político. Y más aún, que la periferia que flota alrededor de la militancia se sienta convocada también por la utilización de ese nombre. Lo he visto desde adentro y todo eso es verdaderamente inédito. Porque habla de la posibilidad de incluir (finalmente!) una sonoridad, no todavía un género, una sonoridad más en la paleta de músicas significativas para los habitantes contemporáneos de Buenos Aires y alrededores. No de París, de Barcelona, de Lima o Los Ángeles: de "buenosaires". Y si fuera necesario advertir cierta liviandad en el uso del nombre del género o especie (según la religión del investigador) justo sería señalar que, en realidad, es mucho más de lo que nombra. Porque puede ser candombe en su clave, murga (murgas, las dos) en su canto, milonga en sus arpegios, rock en sus solos, tango en algunas de sus secuencias armónicas, marcha camión en su marcha camión y, sobre todo, canción. Es una canción. Todos los participantes "músicos" hemos sabido salvar estas diferencias e inclusiones, por encima de nuestros saberes adquiridos, para priorizar el sentido -central en toda producción artística- con el que se ha hecho el objeto. Basta con mirar a la Gloriosa de Boedo sin preocuparse por si sus pasos, saltos y contorsiones se ajustan o no a la clave de la llamada. Lo Rioplatense es mucho más que cada música en particular y viene generando desde hace años entrecruzamientos artísticos y sociales superadores de cualquier intento de sectarismo. Como se sabe hay bibliografía y música sobre el tema. En 2003, por ejemplo, se editó un disco compacto (Música para no ahogarse. Suramusic 2003)compilando un mínimo de producciones que representaban la punta de un gran iceberg "rioplatense", caracterizado por una gran variedad de propuestas, géneros y estilos. Hay también numerosos artículos y compilaciones (de Alicia Martín, por ejemplo) que dan cuenta de las posibles reconfiguraciones del folclore urbano. Ya para despedirme y anhelando la posibilidad de apertura de debates en su blog le explicito la profunda convicción que existe en los espacios de producción artística e intelectual en los que participo de que una mirada actual sobre la diversidad cultural e intercultural se ve siempre enriquecida por la posibilidad de mezclas, fusiones e hibridaciones, en donde los procesos de tradicionalización se manifiestan de manera necesariamente dinámica y libre de todo prejuicio. Le envío un saludo cordial y me abocaré a estudiar atentamente sus textos publicados que seguramente representarán un valiosos aporte para mis clases de música. Atentamente, Alejandro Polemann.

Alejandro Frigerio dijo...

Mi comentario, en la entrada del 27 de febrero..