Lo que se ve actualmente en las Llamadas, por el contrario, dado el poco desarrollo de la “danza afro” en la otra orilla del Plata –comparado con Buenos Aires, donde ya hay varios grupos de buen nivel- son movimientos –realizados principalmente por blancos- que intentan transmitir alguna sensación de “primitivismo” o “tribalidad”.
De la misma manera, los vestuarios –con predominio de animal print y ahora pinturas corporales “selváticas”- remiten inevitablemente a un Africa salvaje y primitiva.
No es que uno espere que quienes vayan a salir en un grupo de carnaval hagan cursos de historia y cultura africana –aunque, en la era de internet, podrían informarse mejor con poco esfuerzo…
Como ya dije en otros posts, la mayor cantidad de bailarines que presentan las comparsas no fue en beneficio de la calidad del baile, sino todo lo contrario. Se ve una cantidad de gente que sale sin haber practicado lo suficiente –o sin haberlo hecho, punto. En todos los rubros de baile. No es sólo un tema de “raza”, claro, pero sin duda quien no lo aprendió desde pequeño ni lo practica regularmente durante el año no lo va a ejecutar lo suficientemente bien en algunas pruebas y un desfile. Para un observador externo que puede comparar con lo que sucedía hace unos veinte años, la situación preocupa, y sobre todo, la impunidad con la que cualquiera parece sentirse con el derecho de “salir” –y hacer lo que se le venga en mente, sin demasiado respeto por conocer el patrimonio cultural que se pretende ejecutar, representar y transmitir.
Volviendo al tema de la imagen de Africa, sí, en Africa hay leones, cebras, jirafas, pero ¿es esto todo lo que hay? Y principalmente, ¿qué tiene que ver esto con la cultura africana, y con el patrimonio cultural afro-americano? A nadie se le ocurriría que, para presentar cultura argentina, por ejemplo, haya que disfrazarse de tatú carreta, de tero o de carpincho.
Asimismo, dentro de los miles de grupos étnicos que hay en Africa, ¿hay que elegir siempre o principalmente los menos vestidos y que más responden a los estereotipos hollywoodianos (antiguos)?
En este sentido es muy instructivo comparar con las imágenes de Africa y las recreaciones de las ropas que se realizan en el carnaval bahiano (ver abajo). Aunque varían cada año, porque los blocos homenajea en cada oportunidad a una república o a un grupo étnico distinto, no hay una repetición incesante de clichés tribalistas, sino un intento de mostrar una Africa dignificada, culturalmente desarrollada, y no “salvaje” y “tribal” como suele ser vista desde los ojos blancos occidentales.
Hay que reconocer que las imágenes del Otro que se transmiten durante el carnaval –aún cuando se pretenda homenajearlo- continuan manteniendo estereotipos que luego afectarán su vida cotidiana. Hay que tener conciencia de que hay formas muy diferentes de denotar visualmente “africanidad” y que éstas tienen consecuencias sociales también distintas.Las Llamadas se han profesionalizado en varios rubros -principalmente los que tienen que ver con su espectacularización-. Podrían también incluir como parte de su profesionalización una mayor atención por el baile y, sobre todo, una concientización acerca de la relevancia de las imágenes que se transmiten sobre grupos étnicos y raciales. No cuesta tanto.