El 24 de julio pasado alguien pintó unas cruces esvásticas en la entrada a una sinagoga del pueblo de Villa Clara, en en Entre Ríos.
En poco tiempo, la página web del INADI tenía el repudio del organismo como noticia principal (lo vi el 28/7, no sé cuándo lo pusieron):
Home de la página web del INADI (28/7/2013)
Apenas cuarenta y ocho horas después del incidente, el interventor del INADI, con buen tino, condenó el hecho, diciendo: “Este accionar constituye claramente un acto delictivo, de incitación al
odio racial y religioso. Llamamos a la sociedad en su conjunto a reflexionar acerca
de estos hechos que nos preocupan y provocan nuestro repudio. Y los convocamos
para juntos desterrar este tipo de manifestaciones de nuestro país, en el marco
de un proyecto que avanza día a día en políticas de unión y compromiso con la
lucha antidiscriminatoria y contra todo tipo de xenofobia.”
Declaración del INADI (28/7/13)
Este hecho y esta reacción no pueden sino recordarme la diferencia con lo sucedido apenas dos años atrás, cuando el templo del pai Alfredo de Ogún fue salvajemente asaltado y ultrajado por una turba de supuestos "vecinos" alarmados por sacrificios de animales.
Hubo una denuncia al INADI, y una reunión con una de sus autoridades (de todo lo cual dí cuenta en este blog, ver abajo) y finalmente, algún tipo de pronunciamiento favorable de la institución -mucho tiempo después, y del que casi nadie se enteró (en cuanto tenga una copia la subo) ....
Pintadas en el templo del pai Alfredo de Ogún
Más allá del cambio de funcionarios en el INADI entre un episodio y otro -que no creo que afectara la rapidez o el tipo de reacción de la institución- una comparación entre ambos incidentes muestra la diferencia abismal que separa la valoración social de una religión respecto de la otra. Nada nuevo, claro. Recordemos que el periodista del noticiero Crónica y otros similares estaban claramente de parte de los "vecinos", así como los policías que vieron parte de los hechos sin intervenir. Las ventanas del templo fueron apedreadas, con niños adentro.
La sospecha de que los afro-umbandistas "algo habrán hecho" y por lo tanto se lo "merecen" permea buena parte de nuestra sociedad, y hasta a los encargados de protegernos de las flagrantes y evidentes discriminaciones -de lo contrario no se hubiera demorado tanto en lograr algún tipo de pronunciamiento favorable....
Todos los templos religiosos deben ser protegidos de la misma manera...
Sobre el ataque al templo de Umbanda, ver:
http://alejandrofrigerio.blogspot.com.ar/2011/03/ataque-al-templo-de-umbanda-reunion-en.html
Para no ser demasiado injusto con el INADI respecto de las religiones de origen afro, recuerdo que hubieron dos dictámenes del organismo respecto de la manera despreciativa en que los medios se refieren a a ellas -ambos, desgraciadamente, poco difundidos-:
Para no ser demasiado injusto con el INADI respecto de las religiones de origen afro, recuerdo que hubieron dos dictámenes del organismo respecto de la manera despreciativa en que los medios se refieren a a ellas -ambos, desgraciadamente, poco difundidos-:
1 comentario:
Estimado hermano, como decía mi abuela, "Es que unos son hijos y otros son entenados"... Here, there and everywhere.
Abraçao!
Publicar un comentario