"Serena, resignada, respondió con una ironía a la pregunta de la entrevistadora de la televisión inglesa: "Estoy muy feliz porque ganó Venus...". Su cara, claro está, decía todo lo contrario. A un costado, Venus dejaba escapar su sonrisa inmensa de dientes blanquísimos que contrastaban con su piel morena. Ella, Venus, era la dueña de Wimbledon una vez más: la quíntuple campeona..."
En el mismo diario, pero en la sección espectáculos, se publica una nota a Enrique Pinti sobre su actuación en la versión teatral de Hairspray que se estrenará en breve. Quienes vieron la película saben que muestra los esfuerzos de una joven por triunfar como cantante en un show de televisión y las dificultades que debe superar por ser gorda. La segregación racial de la época pasa a ser una parte importante de la trama, ya que la protagonista y su mejor amiga encuentran más apoyo entre en los alumnos negros de su colegio que en los blancos. Sus esfuerzos por lograr la integración racial en el show televisivo llevan a importantes conflictos.
Sobre este tema, entre otros, opina Pinti:
"La obra habla de la integración de los negros en los Estados Unidos. Los argentinos nos criamos con la idea de que este país es un crisol de razas, pero existe un racismo terrible y larvado.
Pinti: Sí. Nosotros tuvimos que hacer casting de negros y nos volvimos locos, porque acá no hay. ¿Por qué no hay negros en la Argentina y sí en Uruguay? Tiene que haber una explicación. Dicen: la fiebre amarilla del siglo XIX. Pero ya se fue, digamos. ¿Por qué se establecieron en grandes colonias al otro lado del río y no acá? Será que les hicieron, antes y después, la vida imposible. De eso no se habla. Una vez vi una serie, Los inmigrantes, que planteaba que no todos los extranjeros que venían a la Argentina eran bien recibidos y que muchísimos pegaron la vuelta por racismo. El racismo es un gen podrido que está en todos los seres humanos. Yo soy racista, como cualquiera, sólo que me parece mal y hago todo un trabajo para elaborarlo. A veces me tengo que frenar cuando digo cosas como "tano tenía que ser".
Ahora se instaló un eufemismo, que se escucha bastante en el conflicto del campo, y que compite con el "tengo un amigo judío". "Yo estoy en contra de los negros, pero de los negros de alma".
Pinti: Ah, claro. ¿Qué quiere decir negro de alma? Decí que sos enemigo de la gente mala, de los hijos de puta. En la obra, Velma, una de las racistas de "Hairspray", mete un bocadillo bárbaro. El conductor del programa le comenta que a los chicos les gusta la música negra. Y ella le responde: "Los chicos no saben, a los chicos hay que guiarlos, hay que apartarlos de la oscuridad". Evidentemente se asocia lo negro con lo malo, con el mal olor, esa gente transpira mucho, ¿viste?, baila muy bien porque son como monos.
¿Mejoramos o empeoramos en ese aspecto?
Pinti: Mejoramos, porque está consciente. Se habla. Calculá: en una comedia musical hecha para reírse un rato y pasarla bien, afloran estos temas. Y ojo, que acá la discriminación funciona de una manera más subliminal. Allá, en los Estados Unidos, hasta los '60, los negros no podían tomar el mismo colectivo que los blancos, en algunos estados no votaban... Los latinos tenemos otra forma de discriminar. En última instancia, nos da vergüenza, y aunque seguimos segregando, por ahí pensamos "no, che, tiene derecho".
Una de las fotos que ilustra la nota, y que describe a los principales protagonistas, no muestra ningún actor/cantante negro. No habrán conseguido ninguno?
Fuente: Clarín del 6/7/08. Espectáculos págs. 10-11 y Deportes pág. 75
http://www.clarin.com/diario/2008/07/06/espectaculos/c-01011.htm
http://www.clarin.com/diario/2008/07/06/deportes/d-07501.htm