Una nota en Clarín relata cómo un jugador negro holandés (allá no usan la palabra afrodescendiente) criticó/denunció a Messi por llamarlo "negro".
Según el diario, Royston Drenthe contó que
"cada vez que ambos se enfrentaron Messi lo llamó "negro". "Jugué muchas veces contra Messi y entre nosotros siempre hubo problemas. ¿Sabes qué era lo que más me molestaba? que siempre me llamaba 'negro'", dijo a la revista 'NUsport'.
"Cuando jugaba en el Hércules tuve un pequeño altercado con él. Messi me dio la mano en el encuentro y volvió a decirme unas cuantas veces: 'hola negro'". "
Es claro que en casi cualquier lugar del mundo, esa sería un actitud condenable y, por lo general, mayormente evitada.
Lo interesante del caso argentino es que dependiendo del contexto e inclusive el tono de voz utilizado por Messi, podría ser un acto de desprecio, de reconocimiento amistoso o hasta de cariño.
No voy a caer en la cantinela de que por eso "no somos racistas". Sí lo somos y podemos serlo, y bastante -o más.
Pero es preciso intentar entender la manera en que una u otra actitud se manifiesta en las interacciones cotidianas.
1- es claro que si uno dice negro con bronca y casi añadiendo (de m...) es una actitud racista.
2- si, como comúnmente se hace, se lo utiliza reemplazando el nombre de la persona, o señalando por el seudónimo que el color es el principal atributo de la persona, la intención puede no ser concientemente racista pero sin duda que el resultado es reprobable porque no está bien que una característica física se imponga como la definidora de la persona.
Este es el uso más generalizado y contra el que hay que advertir, porque por su intención de "no ser ofensivo" es frecuente, y termina encerrando a la persona en un casillero fenotípico del que no puede salir -y del que tarde o temprano se desprenden también cualidades morales, intelectuales, emocionales. Siempre y en todos lados será "un negro" y en cualquier momento, fácilmente puede pasar a ser "un negro de m..."
3- si uno es muy amigo de la persona, a veces usa "negro" independientemente del color de piel que uno crea que tiene. Sabemos que en Buenos Aires se usa "negro" al saludar a seres queridos como se podría utilizar "flaco", "maestro", "papá", "tigre" o la palabra, que en ese grupo social, denote una relación bastante estrecha. O sea, uno puede usar un término racial sin intención de que lo sea, pero aplicada a una persona considerada socialmente negra puede ser percibido por esta persona -o no- como un término paternalista, denigrante o racista.
Los 200 comentarios de lectores que siguen a la nota de Clarín y los 110 de la de Infobae, dan, como siempre, un interesante panorama de cómo los argentinos valoramos una u otra manera de dirigirnos a una persona, y el valor que le asignamos a las personas que construímos como fenotípicamente diferentes.
Las notas en:
Estuve leyendo mucho de blogs afroamericanos últimamnete y me quedó una confusión tan grande sobre el uso de "negro" como apelativo cariñoso. Entiendo el peso cultural que tienen palabras como negro y n!gg3r allá, hasta te fijarás que no tipeo la palabra porque no quieren que los blancos la usen, no la uso. pero lo que no sé como se aplica acá es... la intención verdaderamente importa? yo siento que tenemos otra concepción del lenguaje, en la que la intención modifica todo; no sólo en este caso si no en muchos. Muchas palabras se revierten casi absolutamente por el tono... Y otra cosa que no sé es si verdaderamente en la mentalidad nuestra la gente se reduce a la definición que le dan con un apodo basado en un rasgo físico, racial, cultural. No sé si los apodos de acá deshumanizan y objetifican, como dicen en USA o si funcionan con otras operatorias, si significan "esto es lo que me llama la atención de vos" o algo así. También me parece que está bueno plantearse si no es muy modernista pensar que porque le damos un nombre a algo lo estamos moldeando o algo así-...
ResponderEliminarde cualquier manera messi es un pelotudo, si te vas a vivir afuera lo mínimo que podés hacer es averiguar qué se puede decir y qué no en cada lugar. Y en todo el resto del mundo excepto Latinoamérica la palabra negro es un tabú.
Es complicado, y es lo que estamos -un grupo de antropologos, sociologos, historiadores- intentando entender. Como hay varias formas de usar la palabra "negro" en Argentina (principalmente, como "persona de raza negra", como "negro cabeza, villero, etc" o como apelativo cariñoso)no es tan fácil y unidimensional como "nigger" en USA -si la usa un blanco. De todas maneras, ya que el uso signifique "esto es lo que me llama la atención de vos" no es del todo bueno porque indica que la persona no es "suficientemente blanca" para el sentido común de cómo debería ser un argentino, y generalmente con eso vienen asociados una serie de características negativas. Si te interesa el tema, fijate en un trabajo mio que está en mi web page > publicaciones disponibles > movimientos negros > "Negros" y "blancos" en Buenos Aires. Saludos!
ResponderEliminarSí sí,,, es cierto. ahí lo voy a leer...
ResponderEliminarahi lo lei, esta muy bueno. sigo sin saber si esta bien o mal pero quizas no es tan importante eso si no discuitirlo,capaz que de la conversacion por el si o por el no se puede ir tomando conciencia de estas cosas y compartir la data.
ResponderEliminarDepende mucho del contexto, de la intención, del tono con que se usa, de la familiaridad que uno tenga con la persona. Como en Argentina hay poca conciencia sobre estos temas -y hay una ideología de que, "con la calentura del momento" se puede decir cualquier barbaridad, nuestros jugadores frecuentemente dicen bestialidades jugando en el extranjero.
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