Dos propagandas recientes utilizan imágenes de afrodescendientes como protagonistas. De las dos, la menos nociva me parece la de "Diana Arroz" -la otra, claro, es la de "Quilmes Stout". No sé si llega a "simpática" o al menos "inocua" como parece a primera vista. Cualquier caricaturización de un grupo étnico o étnico-racial no es bienvenida por los grupos así representados y no sé si la pasarían en países donde hay un mayor cuidado por qué y cómo se muestra.
Me parece interesante el peinado que le hicieron, un afro muy marcado -como para que no queden dudas, para un público argentino, de que es una "negra mota"-. En la mayor parte de las fotos, al menos, la verdadera Diana Ross no tenía peinados así, sino el pelo más largo, con rulos menos marcados.